Inicia guerra por la “Junta de Gobierno”
Por: Salvador Leal Luna
Pese a que faltan casi dos meses para que la 65 legislatura de Tamaulipas, inicie sus operaciones legislativas en Tamaulipas, ha comenzado la guerra por la mentada Junta de Gobierno del Congreso del Estado; es decir quien presidirá la presidencia de ese órgano interno del poder legislativo.
Se habla del exdiputado federal panista, disfrazado de Morena, el tal por cual de Humberto Prieto Herrera quien desde que llegó en la 64 legislatura quiere ser el mandamás del Congreso, pero no, debido a que en sus venas corre sangre, luego de qué fue ocho años militante de Acción Nacional.
Además, su padre fue secretario de Obras Públicas, cuando el exgobernador, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, fue alcalde del municipio de Reynosa, Tamaulipas. Hoy niega la cruz de su parroquia.
Creo que, con estos antecedentes, no deja de ser un panista más que resentido, debido a que según los que conocen de aguacates, no lo dejaron ser, ni siquiera candidato a la presidencia de ese Ayuntamiento fronterizo del Estado.
Hoy que se reeligió como diputado local quiere ser el bueno; sin embargo, existe otro reynosense que ya fue y me refiero a Armando Zertuche Zuani, quién desea volver a ser presidente hoy de la Junta de Gobierno, debido a que el presidió la 64 legislatura, pero de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, pero salió debido a la grilla en la bancada de Morena.
Mientras tanto, existe otro tirador, que dicen nada de muertito de nombre, Víctor García Fuentes de profesión doctor, además cuentan las malas lenguas que es amigo del actual ejecutivo de cuarta en Tamaulipas y que esta para buscar esa silla en la próxima legislatura de Tamaulipas.
Mientras en esa guerra por la Junta de Gobierno del poder legislativo de Tamaulipas, sale el nombre de la actual presidenta de ese organismo, la diputada local y electa por un distrito de Tampico, Úrsula Salazar Mojica, quien puede o no ser ratificada como lideresa del Congreso local.
Sin embargo, ha declarado qué, así como antes participó por la alcaldía, aspirando a seguir presidiendo el Congreso Local, no está empecinada con el encargo y va a seguir con el proyecto de la transformación, al Estado, como al municipio, bajo el liderazgo del ejecutivo estatal, en la misión qué le sea encomendada.
En la definición del liderazgo del Congreso, para el siguiente trienio, pueden intervenir muchos factores conocidos e imponderables.
Lo que no se puede desconocer es el trabajo, con lo que ha transitado durante el actual ejercicio legislativo, donde en repetidas ocasiones, desde que logró reivindicar el valor del voto de hace tres años y regresar a Morena la mayoría, con el control político y administrativo del Congreso, afrontó con éxito los embates de las minorías, al servicio del pasado, quienes, con artilugios, violencia física y verbal, entre otras complicidades, cíclicamente intentaron despojar a su partido y bancada.
Lo que sí queda claro es que de esos cuatro, al menos serán tres, porque descarto al de sangre azul, ya que es prepotente y altanero, además en una de las tantas trifulcas que se registraron en el interior del Congreso del Estado, donde participó activamente ofendió con palabras altisonantes a empleados del área de seguridad de ese poder legislativo.
Veremos que sucede más adelante, lo que sí es que inició la guerra por la Junta de Gobierno del poder legislativo en Tamaulipas, donde dicen que Úrsula, lleva la delantera.
Por hoy es todo.
HASTA LA PRÓXIMA.
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