La Jefa de Gobierno de Luxemburgo, participa en su primer día festivo nacional

Vaduz, Liechtenstein, Europa.- El Día Nacional de 2025 atrajo a miles de personas a Vaduz con un clima espléndido. Alrededor de 3500 invitados asistieron a la ceremonia de estado en el césped del castillo, con discursos del Príncipe Heredero Alois y el Presidente del Parlamento Estatal, Manfred Kaufmann, así como la bendición de Benno Elbs. Música y cantos acompañaron el evento, antes de un aperitivo y una visita a la rosaleda.
Por la tarde, la ciudad se transformó en un colorido festival. Más de 30 000 visitantes disfrutaron de delicias culinarias, puestos de discoteca, cinco espectáculos escénicos y nuevas atracciones como el escenario electrónico. Las zonas infantiles y juveniles y el pueblo vinícola fueron especialmente populares.
Fue un día festivo nacional especial para Brigitte Haas Has Been: por primera vez, participó en una ceremonia oficial de estado como jefa de gobierno. En una breve entrevista con los medios, habló de su alegría y de los nuevos procedimientos.

Para su primer día festivo nacional como jefa de gobierno, Haas cambió sus hábitos. «Lo primero que cambió fue que me levanté más temprano», explicó. Normalmente empieza este día más despacio.
Sin embargo, su entusiasmo por la festividad se mantuvo inalterado. «Es un día que siempre he esperado con ilusión. Eso no ha cambiado en absoluto», dijo Haas.
La jefa de gobierno se mostró especialmente entusiasmada con la procesión. Sin embargo, recalcó que siempre le ha gustado estar al aire libre. También esperaba con ilusión los fuegos artificiales. Planea pasar la tarde y la noche en Vaduz, donde espera conocer a mucha gente y escuchar música.
Invitados internacionales facilitan debates sustantivos
Haas aprovechó la presencia de numerosos invitados y embajadores internacionales no solo para saludos formales. «Siempre hay debates breves y sustantivos. El feriado nacional es la mejor oportunidad para ello», explicó. Estas reuniones sirven para fortalecer la comunidad y la confianza, y al menos para abordar problemas. Aunque no todo se pueda resolver de inmediato, impulsan las reuniones de seguimiento.