Las flores de cerezo y albaricoque iluminan los campos nevados de Gilgit-Baltistán
Gilgit, Gilgit-Baltistán, Asia.- En la montañosa región de Gilgit-Baltistán (GB), al norte de Pakistán, valles como Choundha se transforman en pintorescos paisajes cada primavera, con la floración de cerezos y albaricoques entre la nieve remanente.
Este fugaz espectáculo natural atrae a turistas deseosos de presenciar el vibrante contraste de las flores rosas y blancas sobre los campos nevados.
Ubicado a una altitud aproximada de 2500 metros, el valle de Choundha está rodeado de imponentes picos y frondosos bosques. La región es famosa por sus impresionantes paisajes y se considera una de las zonas más espectaculares de Pakistán.
“Esta es la primera vez que veo este valle y también la primera vez que exploro Gilgit-Baltistán a fondo”, dijo una turista de Lahore, que se identificó como Sarah.
“Ver el valle fue realmente asombroso”, añadió. “Fue una experiencia preciosa. Después de verlo, sentí que por fin había visto la naturaleza de verdad. Sinceramente, no tengo palabras para explicar lo que sentí y lo increíble que fue todo lo que vimos”.
GB, un territorio administrativo del norte de Pakistán, es conocido por sus cordilleras, como el Karakórum y el Himalaya occidental. La región alberga cinco de los 14 picos del mundo que superan los 8000 metros, incluyendo el K2, la segunda montaña más alta del mundo.
El clima diverso y los fértiles valles de la región albergan una variedad de huertos frutales, lo que la convierte en un importante contribuyente a la producción frutícola de Pakistán.
Los duros inviernos de la región y la corta primavera hacen que la inusual coincidencia de nevadas y flores sea un deleite visual.
“Por pura suerte, hoy pudimos ver tanto los cerezos en flor como las montañas nevadas”, dijo Muhammad Farqan, de 36 años. “Este momento en particular solo ocurre de vez en cuando, cuando la nieve y los cerezos en flor aparecen juntos, y tuvimos la suerte de vivirlo. Estar aquí me animó; todo se sentía vibrante y lleno de vida”.
Los albaricoques tienen una importancia especial en el paisaje agrícola de la región. Se emplean métodos tradicionales de secado al sol para producir albaricoques secos, un alimento básico en la dieta local y una fuente de ingresos para muchas familias.
Además, de las semillas de albaricoque se extrae aceite y la fruta se convierte en mermeladas y zumos.
Las cerezas también se cosechan en abundancia y se venden frescas durante el verano o se conservan para el consumo local.
En los últimos años, los productos a base de cereza, como mermeladas y jarabes, también han ganado popularidad, contribuyendo a los ingresos familiares, especialmente entre las mujeres que se dedican al procesamiento de alimentos a pequeña escala.
“Anoche hizo mucho frío en el valle de Choundha y nevó, lo que hizo que la vista fuera aún más mágica hoy”, dijo el turista Yogi Samyia. “Siento que este momento cumplió con todo el propósito de nuestro viaje y cada centavo que gastamos valió la pena”.
Para muchos, el entorno surrealista deja una impresión imborrable.
“Es realmente impresionante ver la creación de Dios y la belleza de la naturaleza en una forma tan pura”, dijo Fahad Ali, de 28 años. “No puedo dejar de mirar. Se ha convertido en una de las experiencias más memorables de mi vida. He viajado a muchos países, pero nunca había visto algo así”.
(Gilgit-Baltistán, Es una región de India, controlada por Pakistán)
